La probabilidad es la posibilidad que existe entre varias
posibilidades, que un hecho o condición se produzcan. La probabilidad, entonces, mide la frecuencia con la cual se obtiene un
resultado en oportunidad de la realización de un experimento sobre el cual se
conocen todos los resultados posibles gracias a las condiciones de estabilidad
que el contexto supone de antemano.
Expresado matemáticamente, es igual al número de
formas que un evento específico puede ocurrir, dividido por el
número total de posibles eventos. Por ejemplo, si tienes una bolsa
con tres canicas, una azul y dos verdes, la probabilidad de tomar una canica
azul sin mirar es de 1/3. Hay sólo un resultado posible de que se seleccione la
canica azul, pero hay tres posibles resultados en total, azul, verde, verde.
Usando el mismo razonamiento, la probabilidad de tomar una canica verde es de
2/3.
La
gran aliada de la probabilidad es la llamada teoría de la probabilidad, ya que
gracias a lo que esta postula y sostiene, es que los seres humanos podemos
anticiparnos a que algunos sucesos potenciales ocurran finalmente. La
mencionada teoría es muy utilizada y consultada por disciplinas como ser la
estadística, la filosofía, las matemáticas y la ciencia, para sacar
conclusiones respecto de los sucesos potenciales que las ocupan.
La teoría de la probabilidad es un modelo matemático que se ocupa de
analizar los fenómenos aleatorios; esto implica la contraposición
respecto de los fenómenos ya determinados, que son aquellos en los cuales el
resultado del experimento que se realiza, atendiendo a determinadas
condiciones, produce un resultado único y previsible, que se repetirá la
cantidad de veces que éste vuelva a hacerse, siempre y cuando se respeten las
mismas condiciones.
Entonces, dentro de la teoría
de la probabilidad se
intenta determinar la cantidad de veces que puede un determinado resultado
acontecer, con el fin de conocer que suceso es el más probable.
Por
ejemplo, el agua que se calienta a 100 grados Celsius a nivel del mar se
convierte en vapor: éste es un fenómeno ya determinado. En tanto, los
aleatorios, que son de los que se ocupa la teoría de la probabilidad, podrán
realizarse miles de veces bajo las mismas circunstancias pero siempre tendrán
como resultado un variado conjunto de alternativas. Un clarísimo ejemplo
resulta ser las diversas posibilidades y combinaciones que permite el
lanzamiento de dados cuando se está jugando a la generala.
La probabilidad está absolutamente inmersa en
nuestro día a día como parte integrante de una sociedad y comunidad
determinada, ya que en el análisis de riesgos y en el comercio de materias
primas, la probabilidad, tiene una incidencia y una importancia vital.
Existen
tres tipos de enfoques de Probabilidad:
·
Clásico
·
Relativo
·
Subjetivo
Clásico:
Los
resultados de un experimento son igualmente viables, es decir, tienen
teóricamente las mismas posibilidades de ocurrir.
En
este caso la probabilidad de ocurrencia de un evento será:
Número de resultados en los que se
presenta el evento / número total de resultados posibles
Por
ejemplo, la probabilidad de que en una baraja francesa de 52 cartas salga el
cinco de trébol es de 1/52.
De Frecuencia
Relativa:
La
probabilidad de que un evento suceda se determina observando eventos similares
en el pasado. Este método utiliza la frecuencia relativa de las
presentaciones pasadas de un evento como una probabilidad. Determinamos qué tan
frecuente ha sucedido algo en el pasado y usamos esa cifra para predecir la
probabilidad de que suceda de nuevo en el futuro.
En
este caso la probabilidad de ocurrencia de un evento será:
Número de resultados esperados ocurridos
en el pasado / número total de experimentos adelantados
Por
ejemplo, la probabilidad de que Brasil gané el mundial de Rusia 2018 es de 5
mundiales ganados anteriormente / 20 mundiales que se han celebrado en total.
De Frecuencia
Subjetiva:
Se
puede definir como la probabilidad asignada a un evento por parte de un
individuo, basada en la evidencia que se tenga disponible. Esa evidencia puede
presentarse en forma de frecuencia relativa de presentación de eventos pasados
o puede tratarse simplemente de una creencia meditada.